Derretir el chocolate a baño maría.
Poner los dátiles, el miso y 100 ml de agua fría en una licuadora. Batir hasta que solo queden pequeñas motas de dátiles. Añadir la crema de coco y batir durante aproximadamente 2-3 minutos, hasta que quede suave.
Añadir el chocolate a la crema de coco. Batir durante 1-2 minutos más hasta que esté burbujeante.
Pasar la mousse por un colador. Verterla en cuatro moldes (o vasos para beber). Transferir a la heladera durante 3-4 horas, hasta que se asiente.
Mientras tanto, forrar una bandeja para hornear con papel manteca. Añadir las semillas de sésamo a una cacerola antiadherente. Tostar a fuego medio-alto durante 2 minutos, hasta que se doren. Revolver o revolver de vez en cuando. Verter las semillas en un bol o taza.
Añadir el azúcar a la cacerola. Calentar a fuego lento durante 2-3 minutos. No revolver el azúcar. Cuando el caramelo tenga un color ámbar, añadir las semillas de sésamo. No revuelva el caramelo, ya que esto hará que se aglomere. Si es necesario, haga girar suavemente el azúcar y mueva la cacerola para que el calor se dirija a una zona en particular. El caramelo crujiente se mantendrá en un recipiente hermético durante 1 o 2 semanas.
Vierta el caramelo sobre la bandeja para hornear preparada y extiéndalo rápidamente hasta formar una lámina fina. Déjelo a un lado y deje que el caramelo se enfríe.
Cuando esté listo para servir el postre, triture el caramelo
Duración Se necesitan 12 minutos para prepararlo y 3,40 minutos para cocinarlo
Ingredientes (orgánicos) Para una porción de 4 personas.
Para el caramelo crujiente de sésamo:
50 g de semillas de sésamo
150 g de azúcar en polvo
Para la mousse de chocolate y miso:
200 g de chocolate negro
70 g de dátiles Medjool sin hueso
Paquete de 250 ml de crema de coco
½ cucharada de miso blanco