Este es un plato muy popular en Alemania, pero nosotros le hemos añadido un toque oriental y exótico a su preparación.
Corta la cebolla por la mitad y luego en rodajas.
Limpia los champiñones y luego córtalos en rodajas (no demasiado finas).
Enjuaga el pollo bajo el agua corriente, sécalo y córtalo en tiras o cubos (en la típica forma de tiras ligeramente alargadas).
Calienta una cucharada de aceite en una sartén o cacerola grande y saltea primero las cebollas. Cuando estén traslúcidas, añade la carne y fríela también. Hasta que esté hecha, pero no seca ni dura.
Ahora añade los champiñones y fríelos también. Cuando estén ligeramente dorados, añade la nata y el queso crema y revuelve bien. A continuación, añade el caldo en polvo y la nuez moscada, así como la sal y la pimienta a la sartén o cacerola. Advertencia: el caldo de verduras ya es relativamente salado, así que utiliza la sal con moderación.
Ahora sirve las tiras de pollo y decora con cebollino, perejil o cebolletas.
Duración 26 min
Ingredientes: Orgánico Para una ración de 4 personas
400 g de pechuga de pollo
300 g de champiñones marrones
1 cebolla grande
200 ml de nata líquida tradicional
Semillas de alcaravea molidas
1 cucharada de caldo de verduras en polvo
Sal y pimienta
1 pizca de nuez moscada
Hojas de cilantro
Pimentón (pimiento)
Pasta de tomate Bio
Mantequilla baja en grasas
Tomillo
Semillas de sésamo
Ajo
Jengibre